¿Cuándo elegir formación a distancia?
Es interesante cuando nuestro lugar de residencia, sea rural o urbano, se encuentra distanciado del centro formativo que hemos elegido. No es necesario realizar desplazamientos, evitando los atascos, las horas punta, etc. y consiguiendo un ahorro de esfuerzo, tiempo y dinero.
El alumno decide cuándo empezará a estudiar. El mismo es el que marcará sus propios objetivos y distribuirá su tiempo según las necesidades que tenga, sin tener que ajustarse a horarios ni calendarios académicos.
Tenemos el apoyo constante de un profesor-tutor. El alumno accede a él en el momento en que se le presentan dudas, y no se ve forzado a tener que estar en clases en las cuales, quizás tenga que ver temas que ya conoce. Estas dudas pueden resolverse por medio del teléfono, fax o correo electrónico en el momento puntual de la duda.
El alumno recibirá todo el material didáctico en su domicilio o donde él desee. Este material pueden ser manuales, a través de CD o de internet. Estos manuales están minuciosamente preparados y pensados para la gente que realiza los cursos a distancia. Existen numeroso ejemplos, resúmenes, ejercicios (autocorregibles o que se pueden enviar al tutor) etc.
Es una opción idónea para aquellas personas que tienen problemas con su tiempo (no pueden establecer clases con horarios definidos). Son aquellas personas que no tienen buena movilidad para desplazarse, personas que ya están trabajando, personas discapacitadas físicamente, etc.
Las nuevas tecnologías, cada vez más asequibles a todos, ayudan a conseguir la información de una forma más rápida. Sobre todo internet nos posibilita realizar cursos a distancia, crear foros de debate, acceder a bases de datos, diccionarios, noticias, etc.
Este tipo de enseñanza debe ser realizada por aquellas personas que tengan capacidad de disciplina y dedicación, ya que si no es muy fácil dejar la oposición en el camino.
