El vértigo es una alteración del equilibrio que puede generar sensación de giro, mareo, inestabilidad y náuseas. Dependiendo de su origen y gravedad, puede llegar a incapacitar al trabajador temporalmente, siendo motivo de una baja médica (incapacidad temporal). A continuación, te explicamos cuánto puede durar, qué tipos de vértigo existen y qué tener en cuenta para su tratamiento y justificación médica.

¿Qué es el vértigo y cuándo justifica una baja?

El vértigo no es una enfermedad en sí, sino un síntoma que puede tener múltiples causas. Es habitual en trastornos del oído interno, alteraciones neurológicas, migrañas o incluso infecciones.

Cuando los episodios de vértigo son intensos, frecuentes o se acompañan de otros síntomas como vómitos, visión borrosa o dificultad para caminar, es probable que el médico considere necesario emitir una baja laboral para permitir el tratamiento y la recuperación.

Tipos de vértigo más comunes y su duración

1. Vértigo postural paroxístico benigno (VPPB)

  • Causa más común de vértigo periférico.

  • Provocado por movimientos bruscos de la cabeza.

  • Episodios breves, de segundos o minutos.

  • Duración de la baja: entre 3 días y 2 semanas, dependiendo de la respuesta a las maniobras de reposición (como la de Epley) y la intensidad de los síntomas.

2. Neuronitis vestibular o laberintitis

  • Inflamación del nervio vestibular.

  • Inicio brusco, con síntomas intensos: mareo, pérdida de equilibrio, náuseas.

  • La fase aguda puede durar 2-3 días, seguida de inestabilidad que se extiende durante varias semanas.

  • Duración de la baja: entre 2 y 4 semanas, con posible extensión si hay secuelas funcionales.

3. Síndrome de Ménière

  • Enfermedad crónica del oído interno.

  • Crisis de vértigo recurrentes, pérdida auditiva, tinnitus y presión en el oído.

  • Episodios de hasta 12 horas.

  • Duración de la baja: variable; puede ir de días a semanas según la frecuencia de las crisis y su intensidad. En casos graves, puede repetirse o derivar en una incapacidad de larga duración.

4. Vértigo central (neurológico)

  • Se origina en el sistema nervioso central.

  • Puede estar asociado a migrañas, esclerosis múltiple, tumores, ACV, etc.

  • Duración de la baja: impredecible, ya que depende directamente de la causa. A menudo requiere pruebas diagnósticas y derivación a especialistas.

Duración legal de la baja por vértigos

La baja médica por vértigo se tramita como incapacidad temporal por contingencia común (si es enfermedad no laboral) o por accidente laboral (si tiene relación con el trabajo).

Límites legales:

  • Duración inicial máxima: 365 días.

  • Prórroga posible: 180 días adicionales si se prevé recuperación.

  • Duración total máxima: 545 días (aproximadamente 18 meses).

  • Superado ese plazo, el INSS puede valorar una incapacidad permanente.

Procedimiento para solicitar la baja

  1. Consulta médica: el médico de cabecera evalúa los síntomas y, si lo considera necesario, emite un parte de baja.

  2. Informe diagnóstico: puede incluir derivación a otorrinolaringólogo, neurólogo o pruebas como audiometría, resonancia o pruebas vestibulares.

  3. Partes de confirmación: se entregan periódicamente (normalmente cada 7 o 14 días).

  4. Alta médica: cuando el profesional considera que el paciente puede reincorporarse al trabajo.

Recomendaciones médicas durante la baja

  • Reposo relativo los primeros días.

  • Evitar movimientos bruscos de cabeza y esfuerzos físicos.

  • Tratamiento farmacológico: suele incluir antivertiginosos, antihistamínicos, corticoides o diuréticos.

  • Maniobras de rehabilitación vestibular, en caso de VPPB.

  • Evitar conducir o manejar maquinaria mientras persistan los síntomas.

  • Revisión con especialistas si los episodios son recurrentes o graves.

¿Puedo perder el trabajo por una baja por vértigo?

No. Una baja debidamente justificada no puede ser motivo de despido. Además, en casos de patologías persistentes, existe la posibilidad de solicitar una adaptación del puesto o una incapacidad permanente si la afección impide el desarrollo de las funciones laborales habituales.

Conclusión

La baja por vértigo puede durar desde unos pocos días hasta varios meses, en función del tipo de vértigo, la gravedad de los síntomas y la respuesta al tratamiento. Es fundamental acudir al médico ante los primeros episodios y seguir correctamente las indicaciones terapéuticas. Con una atención adecuada, la mayoría de los casos se resuelven de forma favorable.